En entrevista con el Programa Presidencial para la Acción Integral contra Minas Antipersonal (PAICMA), Álvaro Jiménez Millán, director de la Campaña Colombiana Contra Minas (CCCM), explicó los alcances y desafíos existentes para la implementación de una metodología de Educación en el Riesgo de Minas Antipersonal en situación de emergencia, así como las oportunidades que estas representan para las comunidades.
El convenio suscrito entre el Gobierno Nacional y la Unión Europea busca mejorar las actividades de educación, asistencia, desminado humanitario, gestión territorial e información mediante el proyecto de Fortalecimiento de la Acción contra Minas Antipersonal en Colombia DCI-ALA/2010/022-250.
¿Qué representa para la Campaña Colombiana Contra Minas ser parte de este proceso tan importante para el país?
Es un reto, en la medida en el que el país enfrenta con relación a las minas antipersonal unas situaciones complejas y sorpresivas por el conflicto permanente en las regiones donde se está implementando el proyecto. Por otro lado, es una satisfacción porque después de todos estos años, vamos a contar con una metodología que hemos probado previamente en territorio. También, es la suma del conocimiento y de la experiencia de muchas personas que han trabajado para que esta estrategia se pueda aplicar.
Esperamos contar con la participación de la autoridades municipales y departamentales para que el proceso se pueda convertir en sostenible una política que debe ser pública y que debe ser adoptada por todos los municipios en donde existe afectación por este tipo de artefactos, así como con las víctimas, familias y comunidades.
¿Cuál es la cobertura del proyecto tanto a nivel territorial como en población beneficiada?
Este proyecto será implementado en Arauca, Caquetá, Cauca, Guaviare, Nariño, Norte Santander y Meta. La idea es trabajar en municipios con un volumen de accidentes registrados, previamente, por distintas instituciones y el PAICMA. Esperamos llegar alrededor de unas 20.000 personas entre adultos, mujeres, niños y niñas en edad escolar.
No obstante, aunque el proyecto tiene unas metas ya definidas puede que en el proceso se modifiquen sus presupuestos, ya que cuando se van a atender emergencias hay que actuar sin importar este factor.
El Proyecto también tiene un enlace muy importante con las autoridades territoriales ¿Cómo se está realizando esta articulación para garantizar la implementación y su sostenibilidad?
Lo que intentamos en este proceso es articular varias iniciativas. De un lado, hay un gran esfuerzo institucional por hacer que la política de Acción Integral contra Minas sea una política asumida por todas las autoridades. Para ello se necesita una gran voluntad y unas estrategias que permitan articular y concertar cada una de las diferentes actividades que se desarrollan. El proyecto ‘Fortalecimiento en la Gestión Territorial’, que también hace parte de los recursos de cooperación de la Unión Europea, permitirá agrupar cada una de las acciones e iniciativas de los actores en territorio.
En el caso especial de este proyecto de ERM, el énfasis principal es crear una capacidad en la comunidad para enfrentar el reto de la emergencia pero también a que las autoridades locales, especialmente, los alcaldes, líderes de los consejos comunitarios, medios de comunicación y los actores del sector educativo puedan articular todas las respuestas y sentirse protagonistas de la búsqueda de solución a un problema que deben enfrentar colectivamente.
¿Cuál es el resultado final que se espera al cierre de este proyecto?
Lo primero es aliviar la situación de emergencia de las comunidades mediante la entrega de herramientas que les haga posible atender su vida en medio de zonas de conflictos y en las que hay permanentemente combates, así como situaciones pos combates que implican situaciones de emergencia. De otro lado, construir con las comunidades una relación fuerte y de confianza en la que sientan, que si bien las minas son un riesgo, también son una oportunidad para consolidarse como comunidad, sujetos de acción social y ciudadanos de un país que está intentando construir mejores destinos para este presente y para el futuro.
Fuente: PAICMA